La mente humana suele ser el campo de batalla por excelencia de las facciones que se disputan el poder mundial, pues es ahí donde se forman las opiniones y por ende se forjan las distintas realidades y desenlaces históricos, que han de ocurrir en las diferentes coyunturas por las que pudiera atravesar una sociedad.
Los altos jerarcas del mundo tienen muy claro que el poder basado en la violencia y la represión no es sostenible en el tiempo, por lo cual utilizan tácticas persuasivas como la patente ‘US 6506148 B2’ que contempla la utilización de la TV como medio de control mental.
Manipulación electromagnética del sistema nervioso
Siempre hemos reconocido el poder mediático de la TV para inculcar ideas y patrones de conducta en la población, a través de mensajes subliminales y tácticas psicológicas de sugestión audiovisual, no obstante, la patente ‘US 6506148 B2’ ha dado un salto cuántico inimaginable y sin parangón alguno en la historia de la humanidad, planteando el control mental de las masas basándose en la manipulación electromagnética del sistema nervioso.
Este proyecto estadounidense ha propuesto que se pueden programar las ondas electromagnéticas emitidas por la consola de TV, con una amplitud que pudiera alcanzar a todos lo que estén presentes en una sala o habitación frente al televisor, a modo de inducir de forma remota ciertos pensamientos o sensaciones en las personas, como respuesta a la programación que se está presentando.
La base científica y tecnológica de esta patente es esencialmente la misma que la implementada en los dispositivos de control remoto, pues se trata de inducir respuestas psicológicas en las personas a un nivel inconsciente y modificar sus reacciones, tendencias y comportamientos mediante ondas electromagnéticas como si se estuviera cambiando la señal de un canal de televisión.
Si los operadores de este perverso sistema quieren venderte una idea, por muy cruel, inhumana o absurda que esta sea, simplemente la ponen en TV y activan los sensores de tu sistema nervioso que te inducen la sensación de beneplácito, que normalmente sientes cuando estás de acuerdo con algo y de esa forma manipulan tu mente a control remoto haciendo que sientas simpatía por la idea propuesta.
Hoy tienes la posibilidad de contribuir a detener esta atrocidad con solo compartir este artículo en tus redes sociales y de esa forma, lograr que este perverso proyecto quede develado ante el mundo.
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